A veces una ola,
por vientos tempestuosos combatida,
batiendo como un pez su enorme cola
se encrespa, ruge, se estremece, canta,
en cada acantilado se agiganta
y hecha pedazos, pero no vencida
alza su blanca enseña
y a todos nos enseña
a triunfar de la mar embravecida.
Así un alma sola,
por tremenda tormenta sacudida,
se levanta, se inmola,
y en sabe Dios que playas de la vida
nuevamente enarbola
su bandera de fe reverdecida.
Fragmento tomado de: La Venda Transparente, Joaquín Balaguer R.
PD: Dandome un chance con la poesia dominicana.
19/9/07
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8 comentarios:
A pesar de toda la maldad que hizo, fue indudablemente en un genido de la escritura en nuestro país.
Coincido, como político fue asco, no obstante le saco su plato aparte como maestro brillante e indeleble de las letras, sencillamente extraordinario.
Como poeta tienes sus luces...pero no lo considero gran escritor. Tenía la mayoría de su producción poética y la regalé, no por rencor ni por odio, simplemente me enamoré de una literatura más rica...o mejor dicho, de un uso de las letras más acorde con el alma de las manos que la escriben.
Me gustó lo que leí, no conozco mucho del autor, así que no puedo compararle. Las referencias que conozco son sólo como político.
Gracias por compartirlo Anacaona de los moños malo.
Saludos!
Argénida,
Hola, gracias por comentar.
De mi parte yo no soy muy ligada a la poesia, prefiero la narrativa, pero la de Balaguer atrae mi atencion, por qué? no sé, solo sé que me gusta como escribe.
Interesante lo que dices sobre el uso de las letras acorde al alma, sin duda en existía una dualidad en este señor una la plasmo en papel y otra en nuestra historia.
chj,
De nada Desangrada, compartiré los versos que me parescan mas interesantes de este libro.
Realmente es un placer leerte. Muy cierto todo el comentario. Se disfrutan cada una de tus palabras tan certeras.
Saludos,
Gracia Alain por el comentario, bienvenido a mi blog.
Saludos.
Sabes que cuando leí La venda transparente Balaguer ni soñaba con morirse, fue alrededor de los años de la salidad del libro del cortesano en una feria del libro.
Me sorprendí, dada mi edad claro está, porque en los versos se intuía sin mucha dificultad como el señor admitía su ceguera progresiva y paulatina. Hecho que nunca se llegó a admitir del todo cuando se le presentaba al pueblo como candidato hasta no muy lejos de su ida para siempre. No le quito mérito a Balaguer. Al contrario, al leerle él fue directo y sin tapujos pero esas cualidades nunca fueron exaltadas porque como sabemos es mejor mantenernos con la venda transparente, y al fin y al cabo el pueblo no lee, y si lee, no siempre va a tener la capacidad de entender, o analizar lo que se lee. Resultado óptimo de la educación pública y mayormente privada de la nación.
Un saludo.
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